Cerca de 150 especies de murciélagos habitan en México y en Nuevo León circulan 37 especies y subespecies, mismas que deben ser protegidas porque son pieza clave en los ecosistemas, expresó un especialista de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).
El jefe del laboratorio de Mastozoología de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), Arturo Jiménez Guzmán, refirió que se tienen registradas mil 116 especies de murciélagos a nivel mundial.
Expuso que los murciélagos representan el 20 por ciento de las especies de mamíferos del planeta, pero hay más de 200 especies que están en situación vulnerable o en peligro de extinción, de acuerdo a la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
“Los murciélagos son una pieza clave en los ecosistemas, por lo que es importante cuidarlos “, expresó.
Resaltó que “muchas personas desconocen qué función tienen los murciélagos y todas las personas que ven un murciélago lo matan sin ver los beneficios que tienen “.
El taxónomo destacó que “si un murciélago se alimenta de 15 insectos, y por ejemplo, hay un millón de murciélagos, cuántos insectos se pueden comer en un día y esa es la estabilidad que se tiene en la naturaleza debido a los murciélagos”.
Señaló que, además de los murciélagos insectívoros, también hay especies de frugívoros que se alimentan de frutas, flores y hojas; los polinívoros, que consumen polen; carnívoros que se alimentan de la carne, y piscívoros, que comen pescado.
“Los que comen fruta también son importantes, porque transportan semillas a otras partes y eso da como resultado que nacen plantas en lugares diferentes, y los polinívoros generan un cambio genético muy importante en todos los árboles del mundo”, expresó.
Aseguró que las especies que ponen en amenaza al resto, son las que se alimentan de sangre – hematófagas- no por ser peligrosas, sino porque la sociedad sólo reconoce los mitos y leyendas sobre los vampiros y por temor, deciden matarlos.
“Pero la verdadera influencia en el descenso de los murciélagos, es el desorden que hay en las macro ciudades como la nuestra, que se nos olvida que existen áreas ecológicas y que deben respetarse “, indicó.
Advirtió que “hemos modificado totalmente los sistemas ecológicos, no nos interesa, sólo queremos que el hombre viva y eso solo trae consecuencias para el futuro”.
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