Durante 2019, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no otorgará ningún tipo de incentivos fiscales a empresas porque la prioridad será el ahorro, anticipó Alfonso Romo, quien será jefe de la Oficina de Presidencia.
“No conozco ningún plan de amnistía, que yo sepa no hay nada (…) no va a haber incentivos fiscales, al menos en el primer año, hoy no podemos, debemos reducir el gasto corriente, y una vez que esté en orden la casa, ver qué incentivos se pueden dar”, dijo.
En conferencia de prensa conjunta con Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Romo señaló que se están revisando las condiciones en las que se dejan cada Secretaría.
“La revisión de los contratos (de Pemex) informalmente se han estado viendo desde hace meses. A partir de que se otorgó la constancia de Presidente electo a Andrés Manuel López Obrador, esto se empieza a formalizar. Pero no nada más en los contratos de las licitaciones petroleras. En CFE también, todas las dependencias se va a analizar qué se ha hecho, dónde estamos y cada secretario lo está haciendo”, abundó.
Comentó que el diálogo con el sector privado busca generar un México más próspero “que el anterior”, y complementará los 25 proyectos estratégicos del próximo gobierno.
“Con la disciplina fiscal que va a tener el nuevo gobierno, el sector privado y social se convierten en los sectores fundamentales para propiciar un crecimiento en toda la República, y complementar los proyectos estratégicos”, añadió.
El jefe de la Oficina de Presidencia reiteró que el gobierno no recurrirá a más deuda, por lo que será una administración con mucha austeridad.
En tanto, el CCE dio a conocer en un comunicado en el que se establece que durante la reunión con Romo se acordaron 12 mesas temáticas de trabajo, como mecanismo de coordinación y retroalimentación para construir las políticas públicas de la próxima administración.