El avión en el que el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, regresaría a la Ciudad de México lleva más de 4 horas de retraso pues aún no ha podido despegar debido a las condiciones climatológicas y a las intensas lluvias que se registran en la capital.
El vuelo 3487 de Viva Aerobús estaba programado para despegar a las 17:20 horas de hoy del aeropuerto de Huatulco, sin embargo, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México detuvo sus operaciones por algunos minutos debido a las intensas lluvias que se registraron.
Los pasajeros y la tripulación del vuelo 3487 abordaron la aeronave desde las 19 horas, pero ante los retrasos, se les indicó que debían bajar otra vez y esperar alrededor de hora y media más.
A los pasajeros se les informó que hay 120 aviones en espera de poder despegar desde diferentes aeropuertos del país.
Andrés Manuel López Obrador se encuentra de gira por Oaxaca en donde este día visitó las localidades de Juchitán e Ixtepec, a un año de los sismo de septiembre que afectaron la región.
Al volver a descender del avión, los reporteros se acercaron a López Obrador para conocer su opinión sobre el retraso de los vuelos, a lo que respondió:
“Va a llevar dos o tres años resolver el problema de la saturación del actual aeropuerto, porque si se sigue construyendo el aeropuerto en Texcoco, de acuerdo a la información oficial, hasta el (20)23 o (20)24 se terminaría, entonces se va a cerrar el actual, se cierra el de Santa Lucía, queda uno y nada más. Si se hacen las dos pistas en Santa Lucía, y esto es viable, de todas maneras son dos años.
“Hay que pensar en opciones en alternativas, en habilitar aeropuertos como el de Puebla, el de Toluca, como Cuernavaca. De manera extraña dejaron de utilizar el aeropuerto de Toluca”.
