El 20 de mayo, se celebra a nivel internacional el Día de las abejas; quizá te estás preguntando por qué estos animales tan pequeños tienen marcada una fecha en el calendario con su nombre y no sucede igual con una infinidad de especies más que son igual de populares. La respuesta es simple: las abejas son de suma importancia para la supervivencia de todos los seres vivos sobre la Tierra.
Y es que aunque no nos demos cuenta de lo importante que es la tarea que las trabajadoras abejas realizan, ellas son una parte fundamental en la polinización, proceso que permite que los ecosistemas sigan viviendo pues al hacerlo, la flora se reproduce y con ello, la fauna sigue teniendo un hogar y alimento… y así, la cadena alimenticia sigue cumpliéndose desde el animal más pequeñito hasta el más grande, pasando por su supuesto, por los humanos.
Por si lo anterior fuera poca cosa, la Organización de las Naciones Unidad (ONU) asegura que las abejas también son un indicativo de la salud de los ecosistemas; mientras ellas estén presentes y trabajando, significa que el ecosistema funciona de forma natural.
Tristemente, tan sólo en México se han perdido mil 600 millones de abejas en los últimos cuatro años, informó la UNAM y resaltó que las principales causas de que ahora sea una especie en peligro son la contaminación, el crecimiento de la mancha urbana, el uso de pesticidas en la industria alimentaria y el cambio climático.
¿Por qué el 20 de mayo?
Cabría esperar que una celebración de este tipo se diera más cercana al inicio de la primavera que generalmente se asocia con el aumento de la presencia de la especie en distintos espacios, pero no. El día de las abejas se celebra en esta fecha debido a que es el aniversario de nacimiento de Anton Jansa que vivió en el siglo XVIII en Eslovenia y fue pionero de la apicultura moderna.
