Los beneficios de crear y fortalecer los vínculos con tu bebé
A continuación, te presentamos algunos beneficios derivados de fortalecer los vínculos con tu bebé que son respaldados por la ciencia.
Acurrucarte con tu bebé es lo mejor, y no solo por su suave piel y su dulce olor, sino también por el beneficio que brinda fortalecer los vínculos con él, así como para favorecer su crecimiento y desarrollo.
Hablar y jugar con tu pequeño son actividades que hacen maravillas para estimularlo intelectualmente; pero además, pueden ayudarle a aprender importantes hábitos. Por lo que, “mantenerte cerca de tu bebé puede ayudarte a entender las señales que te envía, lo que puede ser benéfico para su salud y bienestar”, explica la nutrióloga Elisa Gómez Reyes, gerente médico de Abbott.
A continuación, te presentamos algunos beneficios derivados de fortalecer los vínculos con tu bebé que son respaldados por la ciencia:
1.- Apoya al sistema inmune
“El contacto piel a piel poco después del nacimiento promueve la lactancia y ayuda a establecer la producción de leche, además debemos considerar que, por sí misma, la leche materna ayuda a desarrollar un sistema inmunológico saludable”, declaró la nutrióloga Elisa Gómez.
Las investigaciones también han demostrado que el método madre canguro (llevar a los bebés y mantener un contacto piel a piel con su madre) es una forma eficaz de aumentar con éxito la lactancia materna exclusiva.
“La leche materna es nutritiva y apoya el desarrollo de muchas maneras, una de esas formas es que proporciona un componente bioactivo llamado oligosacáridos de leche humana o HMO que ayudan a fortalecer el sistema inmune y digestivo del lactante que constituyen el tercer componente más abundante en la leche materna y que han demostrado beneficios en la salud digestiva e inmune del lactante”, dijo la nutrióloga Elisa Gómez.
“Los HMO alimentan a las bacterias buenas que están en el intestino del bebé disminuyendo la probabilidad de enfermedades infecciosas gastrointestinales y fortaleciendo su sistema inmune. Esto es importante porque alrededor del 70 por ciento del sistema inmunológico del bebé se encuentra en el intestino”. Se sabe que la leche materna es y será el mejor alimento para el lactante, pero para las mamás que por razones médicas fundadas no pueden amamantar o deciden dar una alimentación mixta (leche materna más fórmula infantil) ahora hay fórmulas disponibles con HMO que permiten a los padres brindar este beneficio a sus hijos “, aseguró la nutrióloga Elisa Gómez, gerente médico de Abbott.
Ya sea que estás amamantando o estás alimentando a tu bebé con una fórmula infantil, debes tener en cuenta que su alimentación posterior al nacimiento es fundamental para poder establecer una microbiota intestinal saludable y fortalecer su sistema inmune.
2.- Apoya el desarrollo cognitivo
Durante el primer año de vida, tu bebé está conociendo los sonidos y las imágenes que le rodean, mismos que, en un futuro, le ayudarán para desarrollar sus habilidades de lenguaje. Durante este período clave, su cerebro está construyendo cientos de miles de conexiones neuronales por día -más rápido que en cualquier otra etapa de la vida- es decir, “está preparando el terreno para el aprendizaje, la memoria y la cognición”, explica la nutrióloga Elisa Gómez.
La buena nutrición y la importancia de hablar y estimular a tu bebé regularmente son primordiales, ya que en este momento se crean oportunidades para hacer crecer las conexiones mentales. De hecho, una investigación de la Universidad Northwestern, muestra que la exposición a conversaciones en el primer año de vida es igual de importante que el desarrollo del lenguaje, ya que además promueve el aprendizaje, el desarrollo de habilidades sociales y de la cognición.
3.- Satisface las necesidades nutricionales
“Mantener una relación cercana con tu bebé significa que tienes mayores posibilidades de conocer e identificar las señales relacionadas con el hambre o si se encuentra satisfecho, y así ajustar su alimentación de manera adecuada”, agrega la nutrióloga Elisa Gómez. Buscar señales de hambre, como puede ser chuparse los puños o llorar, puede ayudar a que los padres planeen mejor la rutina de alimentación de los pequeños, asegurándose de que reciban la nutrición que necesitan para su crecimiento y desarrollo.
Por otra parte, entender las señales de cuando tu bebé está satisfecho, como puede ser morder o rechazar el pezón o quedarse dormido, pueden ayudar a establecer un vínculo positivo. Muchas veces la técnica de alimentación es uno de los factores más importantes para prevenir síntomas gastrointestinales.
Si tienes alguna duda sobre la alimentación de tu bebé, asegúrate de hablar con su pediatra o con algún profesional de la salud.
Y, por último, pero no menos importante, recuerda apoyar a tu bebé con refuerzos, estímulos y comunicación positiva, en cada paso del camino. Esto, combinado con la vinculación, ayudará a que la relación y los vínculos entre tú y tu pequeño crezcan.