La tarde del sábado 7 de marzo en Parque Bicentenario en la Ciudad de México, fue seleccionada para congregar a un auténtico grupo de amantes de la música ochentera, quienes encontraron en el Festival Remind GNP el espacio perfecto para revivir memorias y compartir con amigos y familiares este viaje musical en el tiempo.
Llegamos justo a tiempo para disfrutar de Grupo Morsa, una banda tributo referente en México, con una selección de covers de The Beatles infalible: Don’t let me down, Eight days a week, Come together, Let it be, Help, entre otros.
Una gran forma de comenzar la tarde cuyo clima fue bastante agradable; podríamos decir que el Remind tuvo esa logística y ubicación que permiten a familias completas disfrutar del show, ya que en todo momento se vivió un ambiente muy tranquilo y Parque Bicentenario es un espacio por demás acogedor.
El siguiente show fue a manos de Christopher Cross, otro referente de la cultura pop ochentera, que alegró al público con sus temas clásicos Sailing y Arthur’s Theme (Best That You Can Do), logrando esa atmósfera perfecta mientras comenzaba a caer la tarde.
Después tocó turno a Fobia, una de las bandas mexicanas cuyo éxito y canciones ha acompañado a varias generaciones desde los años 90, cuyo show fue uno de los consentidos en Remind. Con una selección de hits perfecta que abarcaba diversas etapas de su carrera, los originarios de la Ciudad de México pusieron a cantar al público con canciones como El diablo, Hipnotízame, Vivo, No eres yo, Dos corazones, Miel del Escorpión y Hoy tengo Miedo, entre algunas otras: siempre carismáticos y muy queridos por sus fans en la ciudad.
La noche retro culminó con la presentación de Pat Benatar & Neil Giraldo, quienes también son verdaderas leyendas de la música de los ochentas, con temas desde Love Is A Battlefield hasta Hell Is For Children, hicieron un recorrido de casi 20 canciones durante su set, que por momentos transportaron a todo el público a momentos de nostalgia por las décadas pasadas.
Fue así como esta edición del Remind GNP nos regaló una tarde mágica de regreso al pasado, con la que todo melómano estaría contento al conjuntar el soundtrack de cualquier adolescente ochentero en México, con una colección de cassettes que incluyera desde The Beatles hasta Fobia en su lista.
