Industria automotriz impulsa la innovación y eficiencia mediante la adopción de soluciones en la nube
Querétaro, 23 jul (ANTON Noticias).- La industria automotriz en México está experimentando una recuperación sustancial, con expectativas de alcanzar las metas de producción proyectadas antes de la pandemia. Este año, incluso podría romper sus marcas de producción de autos y autopartes.
Según proyecciones recientes, México podría alcanzar un récord nacional en la producción de vehículos ligeros este año, con un incremento de entre 2.6% y 5% respecto a 2018, el año con el registro más alto hasta ahora. La Asociación Mexicana de la Industria de Automotriz (AMIA) estima que la fabricación de vehículos ligeros alcanzará hasta 4 millones de unidades, superando el máximo registrado en 2018, lo que refleja una recuperación postpandemia y una nueva etapa de expansión en producción y exportación.
Este sector es fundamental en la economía nacional, siendo un importante generador de empleo, aportando significativamente al PIB del país, atrayendo inversión extranjera directa, promoviendo el desarrollo tecnológico y formando parte de cadenas globales de suministro. Además, fomenta el desarrollo regional generando clusters industriales que impulsan la infraestructura local, y adopta nuevas tecnologías y prácticas sostenibles para reducir el impacto ambiental y cumplir con regulaciones globales.
Alejandro Luna, country manager de Infor México, opina que “La adopción de soluciones basadas en la nube son fundamentales para que la industria automotriz mexicana mantenga su competitividad en el mercado global. Estas tecnologías no solo mejoran la agilidad y la capacidad de respuesta ante los cambios del mercado, sino que también son cruciales para cumplir con los estándares de calidad y sostenibilidad cada vez más exigentes”.
La demanda pública de vehículos eléctricos (EV) está generando un renacimiento en la industria automotriz. Este impulso está vinculado a dos factores: cumplir con el objetivo del sector energético mundial de lograr cero emisiones netas de dióxido de carbono (CO2) para 2050 y reducir la dependencia de EE. UU. en las compras de petróleo extranjero.
Alejandro Luna explica que la transición a una producción de EV de mayor volumen no es tan sencilla como simplemente activar un interruptor. “Hay cambios importantes necesarios para facilitar nuevas formas de trabajar juntos para ofrecer con éxito la próxima generación de transporte personal de alta tecnología, lo que incluye abordar nuevos diseños de ingeniería, herramientas, estándares de seguridad y procesos de manufactura”.
Los fabricantes que forman la cadena de valor de esta industria pueden aprovechar soluciones integrales construidas en torno a una plataforma ERP central, que proporcionan un hilo digital conectado, visibilidad completa y una única fuente de la verdad para la toma de decisiones comerciales. Según Luna, esto permitirá aprovechar la ola de crecimiento que está viviendo la industria en México, desde los OEM, los proveedores y los fabricantes de autopartes. La demanda de vehículos ligeros, incluidos los eléctricos, abre oportunidades para el ecosistema automotriz en México que podrían potenciarse con el uso de soluciones en la nube.
Aunque algunas organizaciones ya se están adaptando a los cambios rápidos, muchas no están preparadas, aseguró Luna. Enfatizó que “para aprovechar las oportunidades en EV, los fabricantes OEM y proveedores pueden utilizar soluciones basadas en la nube para gestionar la innovación y la disrupción con mayor eficacia”. Además, agregó que “una plataforma ERP central ofrece visibilidad completa y una fuente única de información para decisiones comerciales. Funcionalidades avanzadas incluyen inteligencia artificial, aprendizaje automático, análisis predictivos, acceso remoto a datos y seguridad cibernética”.
La industria automotriz en México reconoce la necesidad de adaptarse rápidamente a un entorno empresarial cada vez más digitalizado y competitivo. La implementación de soluciones basadas en la nube no solo es una inversión en tecnología, sino también en la capacidad de las empresas para innovar, adaptarse y liderar en el mercado global.