Mientras unos construyen muros, nosotros rompemos fronteras, dice El Potrillo
“No están solos, mientras otros están construyendo muros, nosotros estamos rompiendo fronteras y eso solo se puede hacer con la música”, afirmó el cantante mexicano Alejandro Fernández “El Potrillo” en el cierre del L Festival en California.
El Potrillo fue quien cerró el primero de dos días del evento musical y cultural que se celebra en esta ciudad ubicada al este de Los Ángeles, en donde más del 90 por ciento de sus habitantes son latinos y en su gran mayoría mexicanos.
Fernández, en su espectáculo, presentó en una primera parte temas románticos vestido de traje negro y camisa blanca sin corbata y en donde cantó temas como “Qué voy a hacer sin tu amor”, “Qué lástima” y un arreglo lento de “Hoy tengo ganas de ti”.
Poco después para su concierto, que terminó más allá de la medianoche, y mientras se vestía de charro su mariachi entonó las conocidas composiciones “Huapango” de Moncayo y “Guadalajara”, para animar a los asistentes.
Al reaparecer en el escenario, Fernández interpretó muchos de sus éxitos acompañado de mariachi, entre estos: “Como quien pierde una estrella”, “México lindo y querido”, y “Mátalas”, entre otras.
En una de sus intervenciones el hijo de Vicente Fernández, el charro de México, compartió con emoción el volver a presentarse en Pico Rivera, lo que no había hecho aquí desde hace 20 años.
Antes, actuó Daddy Yankee, a quien se le vio en sobrepeso, pero que sin duda fue el que más prendió a los cerca de 10 mil asistentes, en su mayoría mujeres, y a los que impactó con sus energéticos bailarines y efectos de luces, humo y fuego.
Desde “Gasolina”, “Shaky shaky”, “Hula hoop” y “Party animal”, Yankee fue el que se robó la noche al causar que miles de jovencitas y otras no tanto pusieran a mover las caderas en las áreas verdes y de terregal en el enorme sitio que fue abierto al público por primera vez.
Otro que logró atrapar a sus seguidores fue Juanes, quien se presentó vestido con pantalón de mezclila y chamarra amarilla, más corta que su playera blanca que le salió por la parte baja como la usan los jóvenes en la actualidad.
El colombiano, acompañado de su guitarra, hizo un recuento de sus más grandes éxitos, entre los que cantó “Para tu amor”, “Volverte a ver”, “A Dios le pido”, “Es por ti”, “Me enamora”, “Nada valgo sin tu amor” y terminó con “La camisa negra”.
Otro que apareció y que le costó trabajo animar a las asistentes fue Luis Fonsi, de quien se había anunciado que cantaría por primera vez su dueto con Daddy Yanke “Despacito” y que terminó cantándolo él solo al final de su presentación.
Fonsi cantó sus éxitos como “Aquí estoy yo”, “No me doy por vencido”, “Nada es para siempre”, “Llegaste tú” y “Quién te dijo eso” en el escenario principal que contó con tres enormes pantallas en la parte trasera y dos a los costados y una pasarela en forma de L.
Cuando llegaba la noche El Recodo fue el primer gran artista de varios en la agenda que se presentaron y en lo que parecía un rotundo fracaso del evento, ya que se veían solo más de mil asistentes que entonaron y bailaron algunos de los grandes éxitos de la banda.
Sin su director Poncho Lizarraga, la banda logró poner a bailar a los que ahí estaban, causando un daño colateral al concierto que estaba ocurriendo a unos pasos de ahí de Jose Manuel Figueroa, en el lienzo charro de Pico Rivera y en donde hacia esfuerzos por animar a sus poco más de 10 asistentes.
Pero cuando empezó la banda El Recodo en el escenario principal, esos 100 se convirtieron en 30, provocando que José Manuel Figueroa, vestido de traje negro y texana del mismo color, terminara su presentación.
En otras áreas del festival también se acondicionó un salón con la exposición de pinturas de Frida Khalo y en donde la fundación del mismo nombre puso a la venta reproducciones de cuadros, ademas de playeras y bolsas con la imagen de la pintora mexicana.
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