Charlie Zaa confiesa que 'vivió en un desierto' atrapado en depresión, ansiedad y pánico
El cantante colombiano Charlie Zaa se encuentra en México grabando su álbum “Celebración, con el que además de conmemorar 20 años de carrera, festeja a la vida, luego de que confesó que en un tiempo tocó fondo por los excesos, los cuales le provocaron caer en una fuerte crisis de depresión, ansiedad y pánico.
La placa musical incluye los clásicos boleros que lo dieron a conocer en América Latina, así como algunos duetos con figuras mexicanas y de Colombia.
“(Estoy) feliz porque regreso a México con un regalo maravilloso que es un álbum ‘Celebración’ que me da la oportunidad de festejar 20 años de carrera e incluye a seis grandes artistas mexicanos”, comentó el intérprete colombiano.
Compartió que el álbum evoca los temas de sus inicios, mismos que le abrieron las puertas en muchos países.
“Evoca mi primer disco que se llamó ‘Sentimientos’, con temas como ‘Un disco más’, ‘Nuestro juramento’, ‘Ódiame’ y todas esas canciones que me dieron a conocer, pero además incluye la aportación de Cristian Castro, Yuri, Río Roma, La Sonora Santanera, Margarita, así como un grupo de Colombia que se llama Monsieur Periné”.
Charlie Zaa compartió que no obstante que el disco sólo se llama “Celebración”, la palabra tiene un significado muy especial, ya que únicamente no celebra 20 años de carrera, sino también a la vida, pues tuvo un tiempo que por los excesos tocó fondo.
“Primero yo me considero un hombre bendecido por tener una familia maravillosa, segundo por contar con una mano maravillosa que me rescató de todo eso que es la mano de Dios. Y él me ayudó a salir de esa crisis, donde pasa uno por un desierto a nivel enfermedad, económico o familiar, tenemos que estar muy pegados a la mano de Dios para salir de ahí y ver la tierra prometida”.
Confesó que cuando el éxito no se lleva de la mano de Dios, puede ser muy dañino.
“Cuando eso sucede, de pronto te das cuenta que lo tienes todo y en un instante no tienes nada. Si el éxito lo llevas suelto de la mano de Dios, difícilmente puede tener un bonito fin y para muestra aquí estoy, un hombre que aprendió a creer en las promesas que él me dio a través de mi familia y los pastores, y que gracias a eso llegué a crecer en todos los sentidos”.
Agregó que los hombres deben aprender a cerrar ciclos. “Hay que cerrar ciclos, entender que hay que dejar a un lado la zona de confort, pues de lo contrario se comenten muchos errores y hay que hacerlo con alma, vida y corazón”.
Narró que lo más duro por lo que pasó en esa etapa donde estuvo atrapado en algunos vicios como el alcohol, fue el llegar a pensar que moriría.
“Lo más duro fue el sentirme que llegaría el momento de morir, porque pasé por una crisis muy fuerte de depresión, ansiedad y pánico que me dieron muy fuerte y me provocó ese sentimiento de muerte. Algo que no sabría describirlo, pero a algunas de las personas que les ha pasado, entienden de lo que les estoy hablando”.
Aseguró que aunque a la depresión se le considera una enfermedad física, para él es una enfermedad espiritual, “que se tiene que tratar en lo espiritual y donde debes aprender a cruzar ese desierto que se está viviendo y cuando permites que Dios venga a auxiliarte y haga que todo eso se convierta en cosas bellas”.
El cantante confesó que afortunadamente no tuvo que recurrir a ningún tipo de antidepresivos o medicamentos para salir de esa depresión.
“Generalmente los médicos, psicólogos o psiquiatras recetan medicamentos que te sacan de tu estado real, pero son medicinas momentáneas y no te traen una sanidad real”.
Lo que sí aseguró es que nunca cruzó por su mente atentar contra su vida. “Eso no pasó nunca, porque amo mi vida, mi familia a mi señor y todo lo que Dios me ha dado. Creo que la gente que ha hecho o ha pensado en eso, es porque no cuenta con una familia o un respaldo que los tenga en contacto con Dios”.
Zaa dijo que ahora lo importante es que ha vuelto a lo suyo y “pues feliz de venir a México a celebrar con mis canciones y estoy agradecido con los mexicanos, porque a través de la distancia me han sabido querer y sobre todo me han sabido esperar”.
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