Larry Hernández revela que accidente le ‘robó’ la voz
El cantante mexicano-estadunidense Larry Hernández reveló que no puede vocalizar bien y que se ha dedicado a su reality show Larrymanía (NBCUniversal) para mantener su carrera a flote, tras el serio accidente que sufrió a finales de diciembre del año pasado.
“Será diferente a lo que he hecho hasta ahora. Sería algo como lo que hizo Jenni (Rivera) con ‘Joyas Prestadas'”, afirmó.
La pérdida de las facultades vocales le ha dejado tiempo para escoger las canciones de su próximo disco, aunque no estará en condiciones de entrar al estudio de grabación hasta 2019.
“Ya ha escogido algunas de las canciones, algunos boleros entre ellos, y afirma que “hasta tengo el título”, pero el único detalle que quiso revelar fue que abandonará los instrumentos típicos del género regional mexicano para “llegar a un público más amplio”.
Por ahora está concentrado en Larrymanía y en su salud.
El accidente “ha afectado mucho porque voy a pasar un año entero sin trabajar (en la música)”, dijo Hernández durante una entrevista en Miami, para promover su programa televisivo.
La caída en bicicleta que sufrió en Los Ángeles en diciembre de 2017 le causó serias heridas en la cabeza y la cara. Lleva cuatro operaciones importantes y tantos procedimientos dentales que asegura haber perdido la cuenta.
El golpe me afectó en muchas cosas”, dijo Hernández. “Hay palabras que se me pierden. También tengo problemas con los nervios de la boca por las operaciones que me hicieron. Todavía no puedo cantar”.
Hernández perdió parte de su dentadura, sufrió fractura en un pómulo y el paladar, así como severo daño muscular. Tras una cirugía plástica, su rostro muestra una fina cicatriz en el lado derecho y una leve inflamación en pómulo y mejilla.
Tuvo que seguir una dieta básicamente vegetariana para “promover la sanación” y evitar infecciones.
En estos momentos lleva una plancha de metal y dientes temporales “para poder tener vida social”, pero dice que le quedan muchísimas intervenciones (quirúrgicas) en el futuro, así como intensas terapias neurológicas, musculares, con foniatras y otros especialistas.
“Casi me muero cuando me dijeron que no podía cantar”, reconoció, pero aseguró que ha aprendido a ver tanto la experiencia de la cárcel, donde pasó un mes, como la caída y la dolorosa y lenta recuperación como una oportunidad para “enfocarme y apuntar para dónde quiero ir ahora”.
Ya pasados seis meses de su caída, el artista ha comenzado a grabar la séptima temporada de Larrymanía, el programa de su estilo más antiguo de la televisión en español de Estados Unidos. Las grabaciones se enfocarán en los preparativos de su boda con Kenia Ontiveros, la madre de sus dos hijas más pequeñas.
“Me estaba preparando para el futuro, por si dejaba de funcionar”, reconoció el artista, quien muestra su vida diaria con su prometida, su madre y sus cuatro hijos, entre otros “personajes”. Aunque Larry Hernández tiene prohibido salir del país como parte del acuerdo de libertad condicional al que llegó con las autoridades del estado de Carolina del Norte, por el caso de secuestro y agresión de uno de los promotores de sus conciertos en agosto de 2015, el cantante, asegura, no ha parado de trabajar y de involucrarse en nuevos proyectos.
Esta semana lanzó el sencillo “Gente de la P”, que cuenta la historia de un hombre detenido en un retén de la policía en Sinaloa (México), y que forma parte de su nuevo disco, “Lo blanco y lo negro de mi vida”, en el mercado desde el último mes.